Primer recurso de un enamorado

La naturaleza es impresionante, crea diferentes seres, diferentes sensaciones, sentimientos si lo prefieres, y todas ellas se entremezclan, se enzarzan, batallan por la supremacía, por ser el más bello, por ser el más voraz, por ser el más peligroso, desconociendo el poder que podrían llegar a almacenar, a condensar, si supieran lo que puede habitar en lo más profundo de una mirada, la mirada, pues es bien sabido que solo el fulgor de los ojos,¿Tus ojos? es capaz de fundir mi coleto, de partir en mil veces mil mi demiurgo y dejar que solo la beldad de tu ser y tus formidables palabras hagan la mayor de las catarsis en mi disposición, de unir e hilvanar los pequeños retazos de sueño que es mi amor por tí.

Y aunque se perfectamente que unas palabras apenas podrán expresar lo que mi sentir aqueja, no veo mejor manera de comunicarte, de expresarme para que tus onices observen la pequeña luz que trato de intercalar entre las líneas de este escrito, y aunque se que esto nunca será suficiente solo de este modo creo ser capaz de introducir un pequeño regalo color esperanza en las habitaciones de olor memoria donde la confianza pueda brillar con un nuevo destello, como una nueva alegría quisiera convertirme en la razón de tu sonrisa, en las caricias de tu cabello, quisiera convertirme en tu onírico príncipe sobre jafética cabalgadura y rescatar los recuerdos de un futuro juntos, abrazar unidos la oportunidad de no volver a llorar solos, ni a respirar un aroma de continua soledad, pues por fín he encontrado la motivación de mi existencia, he encontrado el motor de mi vida, te he encontrado a ti entre los helechos de la desesperación y por eso agradezco a mi locura, agradezco a mi existencia que permitiera que un enser de fantasía como tu fuera creado por la sombra de varias divinidades y rezo por ser en algún momento merecedor de tus labios.