Anécdota de mi juventud

Hace muchos años, cuando aún conservaba el ojo derecho, solía frecuentar una taberna nauseabunda donde me deleitaba con unos deliciosos y mundanos manjares asequibles a cualquier bolsillo. El tabernero era un tipo viejo y arrugado, e incluso ahora apostaría mi otro ojo a que más de una vez me he comido algún sucedáneo de rata de calabozo en alguno de sus platos. Eso sí, la explosión de sabores y sensaciones era realmente increíble, aunque el aspecto de la comida no hiciese más que recordarme la consistencia grumosa del vómito de un buen noble de alta alcurnia.

Una noche decidí pasarme de nuevo por allí. Le pedí al tabernero el menú del día: "Callos Malayos". Y en cuanto me los sirvió me puse a llenar el buche, con glotonería y sin modal alguno, puesto que no había ninguna mujer joven a la que impresionar con sutilezas. Había un par de hombres de armas discutiendo, en la barra, sobre temas que para mi eran triviales. Iban ya por la enésima jarra de cerveza cuando uno de ellos desenvainó la daga y amenazó, todo lo firme que podía un beodo en su estado, a su compañero. Pasó todo tan deprisa que tardé tiempo en recomponer todas las escenas en mi mente. Las tripas del guerrero brotaban como gusanos ansiosos de salir de una prisión de carne... y hueso. Vísceras colgantes y sangrientas. Creo recordar que vomité en el plato, y la verdad no conseguí diferenciar mi producto estomacal del menú del día por el que había pagado. No me importó porque, fuese la bazofia que fuese, y tuviese el aspecto a mierda que tuviese, siempre acababa eructando de placer. Pero esa noche, fue distinto. La verdad, no se me pasó por la cabeza que semejante incidente pudiese ocurrir.

Rebusqué entre mis bolsillos y encontré unas pequeñas bolitas. Me las había vendido un comerciante de oriente que pasó por el pueblo unos días antes. Me dijo que se llamaban "bombas de humo" y que eran perfectas para desaparecer entre las sombras. Lancé unas cuantas al suelo, con violencia y, sí, recuerdo que la estancia se llenó de humo. Lo que no me dijo el fulano ese esque tenían un principio activo hecho a base de una planta llamada "cannabis" o algo así. La reacción de todos fue de inmensa felicidad, y yo me sentí volando en una nube tan alto, que incluso podía llegar a tocar la Luna. Figúrense ustedes... ¡La Luna!, menudo disparate.

Al día siguiente desperté, no se como, en la cuadra de un vecino, durmiendo encima de una "grata" inmesidad de perfume porcino. Sustancia cremosa que pringaba mi cuerpo de arriba a abajo, como si de un baño de barro reparador se tratase.

Ese día aprendí una lección muy importante, claro que con los años la he olvidado. Eso sí. No he vuelto a probar los Callos Malayos desde ese día.

En fin, espero que alguno de ustedes saque algo en claro de esto, porque yo voy viejo, y los viejos no nos dejamos enseñar por moralejas, anécdotas o refranes.

Un saludo y que cenéis bien esta noche. Abur!

vaya vaya... aun no se si me a gustado o no este pequeño fragmentillo...
me llama la atención el afán por lo nauseabundo que tienes... puedo preguntar si es por algo es especial?? me resulta curioso XD y dentro de este genero, está bien el relato ^^

Te gusta jugar a rol, no?

Jugué a juegos de rol una temporada, pero para nada me aprendí las interminables reglas y normas que un buen rpg conlleva.

La "obsesión" por lo asqueroso y nauseabundo me atrae desde hace tiempo (claro que no lo llevo a la vida real xD). Me he dado cuenta en más de una ocasión que todo lo que en cuentos y relatos, novelas, etc... que provoca sensaciones vomitivas y repugnantes, a mucha gente le entra el morbo y "disfrutan" de una forma especial dejando volar la imaginación y recreándose en esas situaciones xD.

Suelo escribir con esas notas y recursos porque me divierte ver la cara de mis amig@s cuando se leen mis relatos. Yo creo que es por lo que realmente vale la pena jaja.

Saludos!

jajajaja me alegro que no lo lleves en la vida real XD no esperaba menos XD
Yo cuando escribo lo hago únicamente por lo que siento, no por ver la cara de mis lectores al recibir una obra mía. De hecho, jamás estoy delante de mis amigos cuando leen algo mío porque es un trocito de mi y, en cierto modo, me da un poco de vergüenza.

Es una forma curiosa la que tienes de escribir XD aunque no es el tipo de genero que te esperas encontrar en un foro como este XD

Ignoro como reaccionen tus amigos Maese Ojotuerto... Pero yo revente de risa...
Interesante, lo de tu obsesion por lo, pringoso... Por definirlo de alguna manera...
Ah!!!!
El morbo... Ese curioso alter ego que rara vez nos avisa de su existencia...
Felicitaciones, no puedo decir mas, si uno no pasa un buen rato leyendo algo, entonces ese algo no merecia ser leido...
Y yo he pasado un muy, pero que muy buen rato...

Agur!!!!

Jajajaja Me alegro de que te haya gustado ;-)

Tengo otras ideas en mente, y alguna en proceso, pero ya iré poniendo algún que otro relato del mismo estilo.

P.D: Abstenerse personas con los esfínteres sensibles.